Eurovisión 2010: el interés por el Festival, Karmele y otras bufonadas

“Eurovisión no interesa”. Esa afirmación que todos toman como axioma es en realidad una burda mentira. Si no interesara, ¿por qué es todos los años uno de los programas no deportivos más vistos del año? ¿por qué se congregan ante el televisor para ver la actuación de España tanta o más gente que para ver jugar a la Selección? ¿por qué corren ríos de tinta con los candidatos y la gente no para de hablar de ello, aunque sea para echar pestes? Pues porque Eurovisión sí que interesa. La que no interesa es la OTI.

Antes que nada voy a explicar mi opinión con respecto al Festival. No soy de esos que lo atacan diciendo que está anticuado, que es casposo y cosas de esas, pero tampoco soy un eurofan. Estoy en un punto intermedio.

No lo vería si fuese todas las semanas, pero una vez al año me resulta entretenido para pasar una tarde en compañía opinando qué actuación te ha gustado más, quién ha tenido mejor coreografía o lo horroroso que era tal vestido. Y luego si eso te indignas con que los países del Este estén conchabados, y a otra cosa mariposa.  Y si me lo pierdo no me importa, ni me da por querer saber cómo van las preselecciones en Bielorrusia, pero tampoco tengo ese odio irracional que se le tiene.

Me parece un show entretenido, y suele ser interesante ver el despliegue de medios que se hace y cómo se vuelcan muchos países en ello, y normalmente queda algo curioso, un buen show. Eso sí, te tiene que gustar un poco la música comercial, sino quizás te aburras.

Dicho esto, quiero expresar mi opinión sobre el tema Karmele, Chikilicuatre y demás fauna y flora. Me sorprende que la misma gente que le rió la gracia a Rodolfo Chikilicuatre ahora se indigne con la mala imagen que podría dar Popstar Queen (Karmele) de España en Europa. Algunos se empeñan en decir que Chikilicuatre tenía gracia porque era una irónica crítica al festival y a un estilo de música, y otros dicen que tenía gracia por ser el primero en hacerlo. Pamplinas, porque lo de mandar frikis lo llevan haciendo varios países desde hace mucho tiempo, así que de original nada. Incluso podríamos considerar como “candidatura cómica” la que presentaron Las Supremas de Móstoles, que a mí me hacía infinitamente más gracia que los otros dos personajes juntos.

A mi forma de verlo, Chikilicuatre y Popstar Queen y son lo mismo, sólo que uno tiene un humor tipo El terrat y otro tipo La fábrica de la tele, y a unos les puede hacer más gracia un humor y a otros otro. Pero en esencia es lo mismo, mandar un personaje al concurso para hacer una gracieta y de paso hacer promoción al programa que manda el personaje.

Y a mí, que ya he dicho que Eurovisión no me desagrada, esta historia de mandar personajes cutres para fastidiar no me hace gracia. Pero ni esos dos, ni otras candidaturas tipo a la de John Cobra que ahora se está dando bombo. Sinceramente no entiendo como gente que a la que no le gusta Eurovisión gasta tiempo y esfuerzo en votar a candidatos cutres para que vayan a Eurovisión. Si no os gusta, ¿por qué molestáis? ¿por qué no dejáis tranquilos a los que sí disfrutan con el Festival?

Es como si un ateo entra a una iglesia, le pide al cura que le deje hacer la lectura y cuando sube al púlpito se pone a contar un chiste de Chiquito de la Calzada, por fastidiar. Sería absurdo ¿no? Pues es igual, si no te gusta Eurovisión, pues vete a Benicassim o a donde sea y deja a la gente en paz.

Seguir leyendo